Planificar el estudio y no morir en el intento

Arantxa Couper es una alumna del IES Óscar Domínguez y Marco González estudia en el IES La Laboral La Laguna. Nos cuentan cómo superan la dificultad de realizar dos estudios académicos a la vez: El conservatorio y el instituto. Para ello, realicé dos entrevistas que me confirmaron algunas ideas sobre la gestión de tiempo.
Leonor Rguez de León, (2ºARD) IES La Laboral
¿Cuándo empezaron a estudiar en el Conservatorio?
Marco: Estaría yo en segundo de ESO. Desde pequeño siempre me ha gustado la música y he tenido una fijación por querer estudiar y aprender a tocar instrumentos. En ese año dije: “pues vamos a empezar, vamos a dar el paso”, hice las pruebas de acceso y entré.
Arantxa: El año pasado hice la prueba de acceso al primer curso de Grado Medio, por tanto, tuve que prepararla durante la cuarentena. Luego, las clases empezaron un poco más tarde de lo normal debido a la pandemia.
¿Qué instrumentos tocan?, por mera curiosidad.
Arantxa: A ver, yo hice diez años de Piano, uno de Trompeta (nadie sabe por qué la estudié) y ya llevo 3 años tocando el ukelele. Ahora mismo en el Conservatorio estoy estudiando Canto, por lo que mi repertorio es totalmente lírico (ópera) y estudio esa técnica.
Marco: La flauta travesera.
Hablemos del Instituto ¿te resulta, o resultaba, estresante el compaginar los estudios del Instituto y del Conservatorio?
Marco: Actualmente, sí, ya que 2º de Bachillerato es bastante agobiante y ahora estamos dando temario un “poquito” complicado. Me es difícil compaginarlo, la verdad, pero no imposible.
Arantxa: Pues la verdad es que sí, es bastante estresante y es muy complicado compaginarlo todo, sobretodo porque el Conservatorio me ocupa muchas horas en la tarde. Estoy de 16:00 a 20:00 todos los Lunes, Miércoles y Viernes, y esos días es imposible estudiar todo lo que se debería. También al yo querer dedicarme al canto, asisto a ensayos de Coro. con el Coro Juvenil del Auditorio de Tenerife y el Coro de Voces Blancas del Conservatorio, y de esta forma puedo ampliar y mejorar mi técnica vocal. A veces y debido al estrés antes de algunos exámenes, he faltado a algunas clases.
¿Y el Conservatorio en sí les resulta estresante?
Arantxa: La verdad es que no. Casi es como una liberación de todo lo que tengo ver con el Instituto, aunque demanda muchas horas que son valiosas. Pero en general, a mi me gusta y lo disfruto en cada clase. Puede que en algunos exámenes haya tenido un poco de estrés, pero en general ha sido todo muy tranquilo.
Marco: Como lo tengo como una zona de confort, no. Pero bueno, siempre viene bien ir al Conservatorio, tengo amigos y me ayuda a despejarme aunque tenga que estudiar.
A día de hoy ¿cómo llevan las dos cosas?
Marco: Yo diría que llevo mejor el Conservatorio que el Bachillerato de Artes (Artes Plásticas). Pero bueno, uno lo intenta y saca las dos cosas; eso es lo importante.
Arantxa: Lo llevo medianamente bien. El Conservatorio es definitivamente menos complicado que el Bachillerato que yo hago. El problema está cuando tienes semanas de exámenes y te ves obligada a renunciar a una tarde de estudio para ir a clases. Especialmente si haces un Bachillerato Científico Tecnológico, en el que tienes asignaturas como Física o Matemáticas Avanzadas, las cuales requieren práctica y tiempo. Consigo sacarlo todo pero muchas veces cuesta.
¿Cuánto tiempo le requieren a ambas? ¿Qué más les ocupa?
Arantxa: Evidentemente me ocupa más tiempo el Bachillerato; puedo estar tres tardes enteras estudiando sin parar antes de un examen de Historia de España o Dibujo Técnico, o incluso dos semanas antes de un examen de Matemáticas o Física, dedicándole como mínimo una hora diaria. Sin embargo, en el Conservatorio con 20-30 minutos de estudio antes de un examen voy bien.
Marco: Por la tarde no es que suela hacer mucho, la verdad; me encanta estudiar flauta. Para los exámenes del Instituto, le dedico puntualmente. Se va sacando, que es lo importante. Lo que más me ocupa es el tiempo libre.
Finalmente ¿cuáles son vuestras técnicas de organización?
Marco: Realmente no tengo ninguna, porque soy un desastre y estudio el día antes de la clase. Pero si no, suelo estudiar flauta una hora o hora y media . Para el Instituto sí que no tengo.
Arantxa: Pues mi técnica de organización es saber gestionar el tiempo, marcar horas de estudio y cumplirlas. Yo suelo poner el móvil en modo avión para no recibir ningún mensaje y así rendir lo máximo posible en las pocas horas que tengo. En mi cuarto tengo una pizarra en la que escribo mi horario semanal con todo lo que voy a hacer, y en el momento que lo hago, lo tacho. Eso me ayuda a asegurarme de que lo he hecho todo y de estructurar bien la semana.
Ante las entrevistas de Marco y Arantxa, concluimos que dedicarse a su pasión, les ayuda a compaginar ambas actividades. Además, queda patente que una buena organización es el mejor antídoto para prevenir cuadros de estrés. Finalmente, creo que las actividades extraescolares de tarde son una buena oportunidad para aprender a gestionar el tiempo.
También hay que concretar que al haber alumnos que no tienen actividades por las tardes de alguna academia de idiomas, actividades extraescolares, o simplemente como en este caso, el Conservatorio, a veces, en su mayoría, no tienen un buen plan de organización en comparación con las personas que sí tienen actividades en las tardes. Sin embargo, no siempre es así, hay alumnos que pueden sacar perfectamente su bachillerato o lo que estén cursando sin necesidad de tener un plan de organización, aunque siempre se nota la diferencia de los que sí lo tienen.